“Por que no te callas”: Juan Carlos a Chávez lo que no se animó a decirle a Franco

Puedo estar en absoluto desacuerdo con Hugo Chávez. Puedo cuestionar frontalmente su manera de hacer política y encarar campañas internacionales para ejercer la presión sobre su gobierno como la que su pueblo hoy por hoy, no puede, pero, la actuación del Rey Juan Carlos de España con el ya famoso “ por qué no te callas”, nos ubica a todos ante una conducta no alineada con lo que se espera de un monarca sino de un zapatero. Pero además, el monarca no tiene un trato unificado para los dictadores y vean este este otro video.

Hay varios puntos que abordar en torno al incidente del sábado en Santiago de Chile pero aquí sólo queremos dejar en relieve dos aspectos. Juan Carlos de España no tiene una actitud única ante los totalitarios sin consideramos el “por qué no te callas” a Chávez y la exaltación que hizo del dictatorial gobierno de Franco.
El otro aspecto es que podemos entenderle al Rey y considerar su enojo pero cuando uno es Rey espera un comportamiento público “real” con modos diplomáticos y de altura, con expresiones delicadas y respetuosas. “Señor Chávez, tenga usted las consideraciones hacia los señores Zapatero y Aznar y guarde silencio por favor”. Nunca fui rey ni lo seré pero es evidente que había otras fórmulas para intentar acallarlo a Chávez.
No seremos nosotros los que enseñaremos a un rey a actuar con majestad pero, el “por qué no te callas” es más propio del barrendero municipal a su colega “carnero” que está delatando a un colega.
Es decir, el comportamiento del soberano español puede calificarse de soberano desliz. Y ocurre que don Juan Carlos –llamémosle sólo así a partir de ahora- no es un principiante en la materia de ponerse la corona que lo distingue como un ser de sangre azul que uno cree que cuando pasa vergüenzas como la del sábado ultimo , debe azulársele el rostro y no enrojecérsele.
A esta altura de los acontecimientos y la globalización, los reyes están dejando de reinar y tampoco ejercen su realeza.
Hey!, Juanca no embromeis. Comportaos!