El gobierno de Lugo, los medios y los ciudadanos

Canto del Himno de Paraguay en el acto de asunción Presidencial de Fernando Lugo.

Cuando leí el título del editorial del diario abc color “Mal comienzo del gobierno de Lugo en materia de libertad de prensa”, me imaginé que se clausuró un medio o fue detenido un periodista o alguna decisión de ese tenor.

Le llaman “título gancho” a aquel que impacta y atrae. Fui leyendo el texto y al final se trataba de un “temor” por la creación de un “Equipo de Comunicación del Estado” que según el diario “si bien es una idea que aparenta ser útil e inofensiva", "puesta en manos de personas con tendencias o deseos totalitarios de izquierda o derecha, puede llegar a ser directamente nefasta, pues va a acabar con la libertad de prensa en un santiamén”.
Vale decir, la mera presunción de probable mal uso de un esquema de trabajo implica para abc color un “mal comienzo del gobierno de Lugo en materia de libertad de prensa”. En otras palabras el título no refleja el espíritu del texto. No es la primera vez que ocurre algo así en que el título condena lo que el texto absuelve o simplemente analiza.

Es claro el comentario editorial de abc color acerca de que “parecería que la idea tiende a favorecer el derecho a la información, pero, por otra parte, un ente como el proyectado también sería muy útil para “administrar” la información, vale decir, para establecer qué se va a filtrar y qué se va a dejar pasar, en cuál versión y en qué momento. Crea temor la intención que subyace, sobre todo después de oír las recomendaciones que Correa, Morales y Chávez hacen respecto a la necesidad de domesticar a la prensa libre. Una excelente manera de acercarse a estos “consejos” sería impedir que cada organismo estatal tenga abiertas sus fuentes informativas”.

Un título del tipo “Nuestros temores sobre la libertad de prensa” hubiera sido más justo que el que se publicó. Hacemos esta advertencia porque los ciudadanos debemos estar atentos tanto a los temores fundados como a los falsos temores de cercenamiento de libertades ciudadanas y ver qué advertencias son correctas y cuales no, a fin de ser también mejores lectores de medios y creer lo que debe ser creído y rechazar lo que es truculento.
Los medios ayudan a formar opinión pública pero si nos descuidamos también pueden manipular la opinión pública y para no ser manipulados, tenemos que estar atentos.