A pesar de ser un ácido (ácido desoxirribonucleico) vengo con comportamiento edulcorado a recordarles a todos que contengo la información única e irrepetible de quien está sentado en el Sillón de López que felizmente ha renovado su terciopelo luego de que el anterior usuario lo dejara hecho trizas.
Espero que sea esta la última vez que me usen como una simple muestra para pruebas en exámenes de paternidad y dejen de romperme la cadena de polímeros de una vez por todas.
Odio el fenomenal chismerío en que me han envuelto y vengo a decirles de frente que todos ustedes deberían ocuparse de otras cosas más trascendentes para el país.
Se que un pedazo de mi cadena se encuentra aún bajo investigación en los Estados Unidos de América y francamente espero, ansiosamente deseo que cuando lleguen los resultados, se acabe finalmente esta engorrosa historia que me tiene harto, saciado y empachado.
He estado en boca de todos, no solo aquí sino alrededor del mundo. Ríos de tinta se gastaron en mi nombre. Los más importantes presentadores de televisión se refirieron a mi sin compasión.
He pasado por el calvario de cambios de temperatura en tubos de ensayo. De la luz a la oscuridad.
No se imaginan todo lo que he tenido que soportar, los traqueteos y observaciones. Mi intimidad ha sido vulnerada del modo más desconsiderado que todos puedan imaginar.
No doy más y por favor, ocúpense de sus propios cromosomas y déjenme en paz
ADN Lugo Méndez
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