
Era evidente que el PLRA pretendía simplemente sustituir al Partido Colorado en la administración de recursos públicos para financiar su empinamiento electoralista.
Plata de todos los paraguayos para enriquecer al partido de gobierno.
No basta el multimillonario subsidio que por Ley el Tribunal de Justicia Electoral distribuye entre los diferentes partidos políticos. El diferencial que implica acceder a los cargos públicos es el determinante para posicionarse con ventajas sobre los adversarios.
El poder político para enriquecerse
Estamos ante una estructura dañina para la salud política y social de la República. Debe haber maneras más razonables y dignas de financiamiento de los partidos que no sea con dinero escamoteado al presupuesto público.
Los políticos están dispuestos a hacer trampas para ganar el botín del poder. No se busca el poder para resolver los problemas nacionales sino para acceder al botín y repartirlo para perpetuarse en el poder.
Hemos señalado que hoy la atención en los Centros de Salud es gratuita para la ciudadanía en todo el país, gracias a que el Estado rescató el dinero que el Partido Colorado saqueaba para mantener las seccionales coloradas y repartir dinero público para mantenerse 60 años en el poder.
Nada más perverso.
Pensemos en que no hubiera sido posible la atención sanitaria gratuita si el gobierno hubiera cedido a la exigencia de Federico acerca del 80% de los cargos.
No hubiera sido posible porque el dinero que hoy va para cubrir los gastos sanitarios de la gente, hubiera ido a financiar el electoralismo liberal radical.
¿El dinero de Itaipú es de los partidos o de todos?
Hoy en día la prensa plantea el tema por el lado del modo que lugo destituye a los funcionarios, por ejemplo a Mateo Balmelli de Itaipú y toda la discusión gira en torno a que lo destituyó por teléfono y que configura presuntamente un estilo cobarde y todo lo que se relaciona al modo.
Pero no se hace hincapié en el por qué ni se establece un debate sobre cómo resolver un capítulo que condena a la nación a la partidocracia y no la encamina hacia una democracia moderna y eficiente.
Debatamos: Los partidócratas siguen queriendo apropiarse del presupuesto público para enriquecer a sus partidarios, enriquecerse y perpetuarse en el poder.