El sepelio globalizado

Muertos
de interés global,
funerales de nivel
planetario, tristeza mundial.
Estos tiempos de globalización
tienen sus perfiles sorprendentes
y aunque no es el primero, Michael Jackson
nos recuerda que el fenómeno global no es
solamente económico o comercial.Ya pasó con la
muerte de Lady Di que motivó una onda mundial de sentimientos
de congoja, incluso policlasista ya que el dolor no diferenció a ricos
y pobres. En función de ese prodigio a medio mundo le dolió la oreja
de Holifield que quedó entre los dientes de Tyson. Y es en esa
incomparable transnacionalización de los hechos que el globo se
atormentó con nuestros muertos del Ykua Bolaños y hoy nos
atormentamos ante la crisis económica desatada
por un puñado de
bandidos que somete
al mundo a las consecuencias de sus
irresponsabilidades. Lo bueno y lo
malo de la globalización de economías
y sentimientos, de problemas y sensaciones.