“Me enteré por los diarios” es la frase que a un mes del nuevo gobierno, el Vicepresidente Federico Franco catapultó a las cumbres de la celebridad. Muchas actividades y decisiones que tomó el Presidente Fernando Lugo, incluso reuniones de gabinete político “fueron comunicadas” al Vice por conducto de los medios. Es lo que frecuentemente ha estado señalando con franqueza Franco. “A mi no me ha comunicado nada al respecto y sólo me enteré por los diarios”.
Lo que por un lado podemos señalar entonces tras el primer mes de gobierno de la alianza es que Federico debe levantarse más temprano todos los días para escuchar radio, ver los primeros noticieros de la televisión y revisar la prensa escrita.
Por otro lado, podemos subrayar que el segundo hombre políticamente más importante luego de Fernando Lugo es el ministro del Interior Rafael Filizzola. El Vice está cumpliendo una función muy burocrática en el más estricto cumplimento de la Constitución que dice que tendrá atribuciones presidenciales “en caso” de impedimento o ausencia temporal del Presidente o vacancia definitiva de dicho cargo.
Federico tuvo el lunes sus horas “presidenciales” cuando Lugo fue a Chile a reunirse con presidentes de la región sobre el problema boliviano. Cuando le preguntaron para qué había venido el canciller venezolano además de observar el partido entre Paraguay y Venezuela, dijo que no sabía y que se enteró por la prensa de la reunión que había mantenido con Lugo.
Lo argel del asunto
“Argel” es un sinónimo paraguayo de antipático. No es una acepción reconocida por la Real Academia de la Lengua Española que nos indica que “Argel”, además de la capital de Argelia, designa a los potros que tienen la pata derecha blanca.
Cuando decimos que es argel lo que le acontece a Federico, no hablamos de blancuras de patas caballares sino de lo que le pasó a los laboriosos indígenas guaraníes cuando debieron bajar los primeros caballos que traían los bergantines de los conquistadores españoles.
Cuentan los historiadores que había llegado una primera partida de caballos que muy mansamente fueron descendidos de las embarcaciones por los aborígenes en la Bahía de Asunción. Llegó una segunda partida de potros y cuando los aborígenes los iban a bajar, comenzaron a repartir patadas por doquier.
Los pobres guaraníes maltratados y contusos, se extrañaron de la situación y pidieron explicaciones de por qué los otros eran sumisos y obedientes y estos tan desagradables. Los españoles les explicaron que los otros venían de España donde ya habían sido usados en tanto que estos eran caballos árabes que venían de Argel.
Ahí se comenzó a usar la expresión que inicialmente abarcó a los potros nerviosos- muy argeles- poco después incorporó a las personas intratables y más adelante a las situaciones argeles como las que hoy enfrenta Federico Franco.
Sería muy oportuno que Federico y Lugo instalen Messenger en sus respectivas compus, pero si la norma es desistalar esa herramienta por temor a que sea usada indebidamente en horario de trabajo (como ocurrió con algunos senadores) sugerimos al Vicepresidente de la República que tenga un Gmail y que todas las mañanas revise el correo del Presidente.
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