La crisis financiera que explotó en Wall Street pero extendió sus ondas expansivas a todo el mundo, no augura nada bueno para las remesas de paraguayos en el exterior como tampoco para la presencia de ellos en sus puestos de trabajo.
Se estima que entre 600 y 700 millones de dólares serán inyectados este año a la economía nacional, proveniente de los envíos de paraguayos de ultramar a sus familiares locales.
Sin embargo, si se produce una recesión profunda, indirectamente vamos a recibir el ramalazo de la crisis.
Mujer paraguaya heroica y gentil
Un dato curioso elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo señala que el 48% de los que reciben dinero son hombres lo que indica que el gesto de amor medido en plata es de sus mujeres migrantes. Lo que el BID no dice es que algunas mujeres, en lejanas comarcas con el tiempo se enamoran de otros hombres y cuando muere el amor, generalmente muere la remesa.
Volviendo a los datos estrictamente económico, más de la mitad del dinero que el Paraguay recibe como parte de ese flujo, los receptores lo destinan a alimentación. Menos del 20% al ahorro; el 15% se destina a inversión en algún tipo de negocio por cuenta propia.
Por otro lado, el 12% se orienta a la educación y sólo el 1% a construcciones. La corriente migratoria catapultó su importancia como fuente de divisas fuertes y los emigrantes “más solidarios” con sus familiares son los que trabajan en España.
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