Es evidente que a un sector de la prensa paraguaya le causa mareos que el gobierno tenga un plan comunicacional. Podemos entender que es natural que haya un control de la prensa comercial sobre lo que comunica el gobierno y ejercer un monitoreo pero de ahí a cuestionar o torpedear la idea misma de la comunicación oficial ya nos ubica ante un acto peligroso y hasta podríamos decir deshonesto.
Cuando a fines del año pasado el gobierno organizó el primer foro de la comunicación, el diario abc color aseguró editorialmente que el gobierno buscaba amordazar a la prensa.
Llegó a anticipar que se estaba ante un plan encaminado a bastardear la democracia. Utilizó la figura de que el gobierno buscaba calzar el palo entre las ruedas de la libertad de expresión.
Eso lo expuso incluso antes de iniciarse el foro y durante su desarrollo intentó siempre cuestionar su realización porque entendió que escondía objetivos totalitarios que siempre fueron desmentidos por el gobierno.
El propio Presidente de la República enfatizó que un objetivo de esa naturaleza no forma parte de la agenda de gobierno. No hubo caso, el matutino atacó el foro y al gobierno por sus presuntos propósitos de acallar la crítica.
Concluyó el foro altamente aleccionador y constructivo y lo aseguramos que fue así porque participamos desde el principio hasta el fin y nadie puede decir que allí se analizaron planes liberticidas. Yo no creo que ningún medio o periodista pueda afirmar hoy que el gobierno pretende acallar a la prensa y aportar pruebas al respecto.
La agencia
Pero como no aconteció lo que abc vaticinaba, el matutino vuelve a la carga con la puesta en funcionamiento de la agencia de noticias en la órbita del gobierno. El Jefe de Estado y los directores del programa anticipan que no será una agencia de propaganda del gobierno sino que de información pero abc color afirma en su edición de hoy que “En su afan de contrarrestar a la prensa independiente Lugo pone en marcha su plan de propaganda.”
Como en el caso anterior en que afirmaba que “Gobierno busca pretextos para restringir la libertad de expresión” ahora afirma que esta en marcha un plan de propaganda.
Yo me pregunto honestamente qué pasará si al final de su mandato Fernando Lugo demuestra que ninguno de esos anuncios se cumplieron y querella al diario abc color por difamación y pide resarcimiento económico que luego lo destina a la caridad pública.
De lo que hablamos es de transparencia y responsabilidad de la prensa. Es decir de criticar lo que hay que criticar pero ocurre que aquí se se sobrepasa la crítica y se anticipa lo que va a ocurrir. Si no ocurre lo que se asegura que va a ocurrir, alguien debe hacerse cargo de sus errores.
Por de pronto, nosotros vamos a monitorear lo que acontece y daremos la razón a abc color, si la tiene.
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