Lugo presidiò esta mañana reunión del "equipo energético"
Fernando Lugo ya venció a un cáncer: el Partido Colorado que hizo del Estado una agencia de empleo de sus correligionarios y lo llenó de ganglios de corrupción e ineficiencia. Ahora se propone vencer al otro, mantenerlo a raya.
Juzgo altamente oportuno que el Congreso haya enviado un mensaje claro a los demás sectores políticos y la ciudadanía en el sentido de respetar la institucionalidad y evitar que la voracidad de los herederos políticos los hagan maquinar penosos planes encaminados a apresurar un sepelio político desvergonzado e injustificado.
Creo que estamos ante una de las decisiones de mayor madurez en los últimos años en que la cúpula de la institucionalidad de la República llama a la sensatez y la prudencia porque justamente es eso lo que corresponde.
Frenar la ansiedad de los "herederos"
Ciertamente vivimos momentos electorales en que se producen reacomodamientos de fuerzas y en esa coyuntura se disparan las ansiedades de los grupos que sin muchos miramientos buscan encumbrarse aprovechando el menor resquicio.
Y lo hacen sin rubor, con absoluta falta de tino. Lo hacen con desvergüenza, procacidad, con cinismo. La herencia es importante pero los herederos están queriendo apresurar el sepelio.
Felizmente hemos visto voces de cautela en los medios a pesar de que están los que en aras de un presunto debate democrático, estimulan el morbo.
Los ojos de los demás países están vueltos hacia el Paraguay para monitorear la evolución de la situación política y lo mínimo que deberíamos hacer es asumir un comportamiento maduro que implica fidelidad a la institucionalidad.
El país marcha por buen camino. Son inéditos los resultados económicos en el primer semestre del año y se vaticina uno de los más altos crecimientos de toda la región en el 2010.
¿Para qué sacudir innecesariamente el avispero porque así conviene a grupos ávidos de poder?
Hay que seguir el rumbo y no claudicar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario