Contratos estatales de los fletes de petróleo: Lugo debe tirar a la basura lo que es basura

Ha sido nombado Pablo Sugasti como titular interino en Petropar tras la renuncia de Cibar Granada. El petróleo es sucio, resbaladizo, pegajoso. Mancha y contamina.

Friends to be friends. Se dijo antes del nombramiento que Sugasti pertenece a una rosca de amigos y financistas de la campaña presidencial de Fernando Lugo que curiosamente están haciendo negocios en la órbita del Estado.
La renuncia de Granada, dejó entrever que no se manejaban intereses limpios y que el hombe no estaba dispuesto a poner su firma en resoluciones que no formaban parte de su modo de pensar y de actuar.

No sabemos si las sandalias pisaron charcos de petróleo pero los primeros salpicones de casos poco claros le llegaron demasiado cerca al Presidente. Saltaron a la cresta de las olas los amiguismos, favoritismos, tráfico de influencias, maniobras raras, renuncias deficientemente explicadas en Petropar, la empresa estatal que maneja el negocio de los carburantes importados y hubo conato de escándalo.
Lo ideal es que inmediatamente se suspendan todos los contratos de flete de petróleo para llamar a una licitación pública y transparente y que no quede para nadie ninguna duda sobre los próximos contratos.

No hay otra
Pretender soluciones con medias tintas servirá simplemente para profundizar las primeras grandes dudas que se han instalado en la ciudadanía.
No cabe dejar apenas la sensación de que se ha maquillado el problema porque actuar así se estimularía el mal ejemplo y en otras instituciones se relativizaría la seria lucha contra la corrupción y se combatirá simplemente la corrupción desembozada para practicar la "corrupción sabia" o la "corrupción experta".
En el mejor de los casos lo que se ha visto ahora es que imprudentes aprendices de corruptos tocaron petróleo de un modo deshonesto y han dejado sus huellas digitales hasta en Mburuvicharoga (en guaraní: la casa del cacique).
Felizmente son catecúmenos de peces gordos, algo así como principiantes de mafiosos. Decimos felizmente porque se han movido como elefantes en una cristalería y pusieron a funcionar todas las luces de alarma.
Que el negocio de los combustibles, no convierta al proceso inaugurado el 15 de agosto del 2008 en combustible.
Hay que tirar a la basura lo que es basura.
Así de simple.