Los cleptócratas paraguayos y el pánico a la izquierda de Lugo (final)

La elección de Fernando Lugo es consecuencia del hartazgo de la sociedad con relación a la confabulación del gobierno y los empresarios. Les fue muy bien a los gobernantes y a los hombres de negocio que estaban en el club y el resto debió emigrar o sufrir o empobrecerse. Apareció Lugo con un discurso integrador, incluyente y volcó la atención pública. La idea que presentó fue sustituir claques por alianza, dejar de lado las marginaciones e instalar una mayor justicia social.

No existen empresas exitosas en sociedades fracasadas. Este es un principio acuñado en el contexto de lo que se entiende por desarrollo sostenible.
Si los paraguayos seguíamos emigrando quien hubiera quedado aquí para consumir los productos que se fabrican.
Estábamos convirtiendo el Paraguay en un país de abuelas y nietos. La mayor fuerza laboral estaba yéndose en busca de otros horizontes.
Claro, dirán ustedes que hubiera sido mejor para los sojeros pues se hubieran apropiado de más tierras para producir y exportar.
Para ellos, somos un estorbo y verían con buenos ojos que se concrete cuanto antes una nueva oleada de emigración. Mejor para ellos.

Pocos ganadores, muchos marginados
Pero nadie quiere un modelo en el que hay pocos triunfadores y una mayoría de marginados sino sino un país de grandes oportunidades para todos y en el que triunfen efectivamente los mejores y no los amigos del poder.
Estamos lejos, muy lejos de alcanzar una sociedad así pero vale la pena encarar esfuerzos en esa perspectiva.
Lamentablemente su inexperiencia política y sorprendentemente la borrachera que le produjo el poder han provocado desatinos en Fernando Lugo, algunos de los que también fueron incentivados por el descomunal acoso mediático al que fue expuesto en los últimos meses.
Se proyectan con particular perfil de ofensa a la ciudadanía los nombramientos de sus parientes en oficinas públicas.
No deja de fastidiarnos ese comportamiento a pesar de que la parentela de Lugo en el gobierno, ha venido a demostrar algo que no teníamos registrado como un riesgo y que llevó al Presidente de la República a exclamar: Los parientes son los peores.
En efecto, Mirta Maidana, la sobrina, es su enemiga declarada ahí en el más cercano círculo familiar.

Nepotismo transparente
Ese es un perfil desprolijo que el nepotismo de Lugo nos ha revelado de un modo grotescamente generoso.
El lado positivo sería que hay transparencia. Se sabe quienes son los parientes enganchados al gobierno, se conoce el monto de sus salarios y hay un mapeo de dónde están.
Es una rara ironía del cambio. Se trata de un nepotismo transparente porque los nepotismos de las cleptocracias eran oscuros y secretos.
Es más, esos nepotismos incorporaban a las queridas de los gobernantes y nadie lo sabía. Eran “planilleras” vale decir figuraban en las planillas salariales pero no trabajaban o si lo quieren, trabajaban fuera de horario en tareas que no eran de interés público.
Aclaremos, no cumplian tareas públicas en las oficinas en las que cobraban. Eran mujeres públicas que cumplían tareas privadas fuera de los horarios de oficinas, a pesar de que circularon varias fotos en internet y hasta videos que desmienten lo que estamos diciendo.

Las queridas tenían sueldos, ahora querellan
Pero bueno, si las queridas antes tenían salarios del Estado, lo que ahora ocurre contrariamente es que las queridas querellan al Presidente y allá él. Es un bochorno que lo debe administrar.
En cualquiera de los casos así como Clinton por su escándalo con Mónica Lewinsky debió vérselas con su círculo familiar mientras hacía buen gobierno, esperemos que las cosas funcionen de un modo similar aquí.
Hay un respaldo de las urnas por 200 mil votos de diferencia que debemos precautelar, aunque los cleptócratas quieran volver a ingresar al Palacio de López, por la ventana.

Esta es una nación cansada de los ladrones en función de gobierno, los cleptócratas.
Son hombres y mujeres hipócritas que no faltan cada 8 de diciembre en Caacupé y se ubican en lugares donde van a ser captados por las cámaras de televisión y se golpean el pecho y miran al cielo en poses angelicales para retornar luego de la misa, raudamente a sus fechorías.
Disfrutando de los beneficios de sus negociados, muy ocupados en ellos, nunca hicieron autocrítica y no pensaron que un día la sociedad les pasaría la factura y elegirían un gobierno que les quitaría la mamadera.

Aún conservan poder
Aún tienen mucho poder en el Congreso desde donde amenazan frecuentemente con un golpe parlamentario para apartar de su cargo a Fernando Lugo y acercarse de nuevo al control político y económico del país.
No es de ese modo que el país saldrá adelante. Ayudemos a que Lugo funcione cada vez mejor y que vaya cumpliendo sus promesas electorales algunas de las que ya está cumpliendo como el ataque a la pobreza extrema, la salud gratuita para todos, nunca se llegó a una cobertura de vacunación de alrededor del 90% como ahora; las reivindicaciones en Itaipú están en marcha, para citar sólo algunos puntos.