martes, enero 12, 2010

Secuestro, marketing del terror y consumismo impuro: A la carne regalada no se le mira el origen

La impotencia en el rostro de Diego Zavala -hermano de Fidel- al anunciar la donación
de carne por gentileza de los secuestradores.


“Señor, le vendo relojes buenos y baratos, del puerto es” (mercadería robada)- “Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) dona alimentos decomisados a comedores de pobres” (alimentos contrabandeados) - En la Chacarita forman cola para recibir carne donada por Familia Zavala, como cortesía del Ejercito del Pueblo Paraguayo (EPP) que tiene secuestrado a Fidel Zavala” (carne obtenida por extorsión). Tres acontecimientos distintos y un común denominador.

En los tres ejemplos que mencionamos, todos reales, se mezclan conductas gubernamentales y directamente de delincuentes, hermanadas desde un punto de vista moral.
El ejercicio de las tres actitudes que como podrán observar provienen de fuentes diferentes, apuntan todas a crear una cultura distorsionada cuyo resultado es la instalación de la indignidad.

Marketing del terrorismo
Es penoso ver la fila de centenares de personas esperando su porción de carne sin importarles que sea el producto de una vil extorsión. Es indigno pero claro, el hambre también lo es.
La familia Zavala ha tenido que tragarse la humillación de exponer públicamente que dona 30 reses faenadas a tres comunidades indigentes "por gentileza" de los secuestradores de uno de sus miembros.
Los terroristas que tienen secuestrado a Fidel Zavala hacen “filantropía” con productos del secuestrado, vale decir hacen marketing del terrorismo con bienes ajenos como si fueran políticos seccionaleros colorados que se apropiaban de bienes públicos para beneficiar a correligionarios.

A caballo regalado...
Cuando la Secretaría de Emergencia Nacional o el Despacho de la Primera Dama donan productos decomisados porque ingresaron de contrabando actúan de un modo parecido.
Se apropian indebidamente de una mercadería que no les pertenece para hacer "filantropía" con rubros que ingresaron al país al margen de las normas aduaneras.
Los productos ingresados al país de contrabando deben ser destruidos o bien subastados en beneficio del erario público.
Es lo que manda la Ley. Es el procedimiento que la sabiduría recomienda para evitar el uso politiquero de bienes de origen irregular.
Finalmente como se instala una mentalidad corrupta que en realidad es ya una cultura de la corrupción hay un amplio sector de la ciudadanía que no repara en el origen de una mercadería y rige el principio de “a caballo regalado no se le miran los dientes”.

Penoso, indigno, lamentable.

3 comentarios:

  1. Creo que el gobierno debería decomisar la carne y evitar la consumación de la extorsión.
    No debería permitir que se haga el reparto. Es una vergüenza para todos los paraguayos.

    Enrique

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  2. Torpe!, si el gobierno interfiere eso es lo que quieren los terroristas para predisponer al pueblo contra el gobierno. Es cierto lo que señala el artículo que a la gente no le importa de donde sale la comida sino que haya comida.

    J.C.

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  3. COMITE DE CRISIS

    No se si se evaluó o no el decomiso pero parece razonable la idea. Se inscribe en la línea del proyecto de proteger los bienes de los secuestrados y bloquearlos.

    El gobierno debería manejar todo lo que atañe al caso Zavala en un comité de crisis de modo a cuidar todos los flancos posibles.

    Es evidente que si deja el "arco libre" los secuestradores van a seguir humillando a la familia del secuestrado lo que no se puede tolerar.

    Hay una revictimización de la familia Zavala que tiene a uno de sus miembros secuestrados y es expuesta a la humillación.

    Como sociedad deberíamos pronunciarnos contra la aceptación de carne donada en condiciones de extorsión, sobre todo si los "beneficiarios" reciben ayuda de la Secretaría de Acción Social.

    El tema debe ser analizado en un comité de crisis.

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