jueves, abril 30, 2009

Advierten que la declaración de emergencia por sequía puede ser una fábrica de haraganes



Fuera de la lluvia negra que fue escasa, el cuadro general de lluvias en todo el país es deficitario. En varias zonas se vive un trance crítico y el Gobierno estudia declarar “Emergencia” en varias zonas. Escuché a un dirigente mennonita del Chaco exteriorizar su preocupación por una eventual declaración de “Emergencia” en esa zona porque “vuelve haraganes a las personas que simplemente se dedican a esperar comida y dejan de trabajar”.

Ese concepto debe llevar a las autoridades a pensar muy bien sobre los perfiles de un plan de emergencia de modo que canalice ayuda vital pero sin bloquear el espíritu de trabajo de la gente.
Mientras el ingreso per cápita promedio del Paraguay no alcanza 2 mil dólares anuales, el de los mennonitas del Chaco supera los 6 mil dólares anuales. Volvemos al viejo tema de la ética protestante y la católica y que las sociedades protestantes son más desarrolladas que las católicas.

Multiplicación de panes vs. ganarás el pan con sudor
Digamos que probablemente el plan de emergencia por sequía va a poner más énfasis en la multiplicación de panes que en el “ganarás el pan con el sudor de tu frente”. De cómo hacer para que el plan sirva para estimular a salir adelante y no para anular la laboriosidad de la gente hemos de salir robustecidos.
No se debe contribuir a inyectar más cultura mendicante en la sociedad sino que por el contrario, encaminar una cultura favorable a la productividad, la creatividad y el ingenio para sortear dificultades.
A priori, el gobierno aparece como necesitado de dar pan y pescado para aplacar recientes broncas ciudadanas.
Objetivamente transita un escenario que de algún modo lo condiciona en ese aspecto y va a enfrentar la tentación de encumbrar la alicaída figura presidencial con una conducta populista que ya emergió antes con el empecinamiento en regalar 40 mil millones de guaraníes (unos 8 millones de dólares) solamente a los sesameros del Departamento de San Pedro.
Los mennonitas se desarrollaron por una serie de factores entre los que adquiere rol fundamental su modo de interpretar la palabra de Dios.
Hay teólogos mennonitas que consideran que el Paraguay edificó su pobreza en base a una serie de factores entre los que adquiere un rol principal, su modo de interpretar la palabra del mismo Dios.
Se puede estar o no de acuerdo con ello pero si miramos los resultados socioeconómicos, tal enfoque tiene peso.
Lo ideal será que la opción preferencial por los pobres de la Iglesia Católica se aplique de un modo que no contribuya a perpetuar la pobreza sino de un modo que los pobres adquieran luego una opción preferencial por la riqueza y que surja con fuerza lo que está en Efesios 4:28. “Que el que no trabaja, deje de robar”.

1 comentario:

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