El Hombre del Año en Paraguay, el Fiscal Arnaldo Giuzzio es un estorbo para el gobierno. Es un atrevido que decidió imputar por enriquecimiento ilícito al coronel Heriberto Galeano, al mismísimo Presidente de la Cámara de Diputados Víctor Bogado y a quien no le ha temblado el pulso para imputar a quien cruzara las fronteras de la legalidad, así fueran sus propios colegas, se apresta a ser confirmado en su cargo contra todos los pronósticos e incluso en contra del más ferviente deseo del gobierno nacional.
Este anuncio que va incluso contra el 99% de las probabilidades, simplemente está basado en el sentido común.
Giuzzio, a cuya esposa intentaron asesinarla aflojándole las tuercas de las cuatro ruedas de su vehículo para que sufriera un accidente que felizmente no se produjo porque descubrió la maniobra; es probablemente el hombre más odiado del gobierno que ahora tiene en sus manos firmar la decisión de confirmarlo o no.
En los últimos días, en los cuchicheos entre los principales referentes del oficialista Partido Colorado, la fórmula de cómo sacar de en medio al Fiscal anticorrupción más inflexible y con mayor presencia de ánimo que se recuerda, haya tenido la sociedad paraguaya, es tema central e ineludible pero, nos animamos a hacer “periodismo de anticipación” y asegurar que finalmente, Giuzzio va a ser confirmado.
Podrán decir que lo nuestro no pasa de ser un ejercicio de ingenuidad, una exposición de candidez ¿Cómo lo van a confirmar a un Fiscal que precipitó el pase a retiro del coronel Heriberto Galeano, en su momento uno de los jefes militares más poderosos como comandante del Regimiento Escolta Presidencial –como podrá suponerse, el jefe más cercano al Presidente Nicanor Duarte Frutos- y actualmente procesado por enriquecimiento ilícito?
Se preguntarán cómo se puede anunciar aunque fuera como una mera especulación que lo van a confirmar a Giuzzio si decidió imputar nada menos que al Presidente de la Cámara de Diputados Víctor Bogado, envuelto en un fraude de más de 2 millones de dólares cuando se desempeñaba al frente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL).
La información que se publica hoy en los medios indica que la Corte Suprema de Justicia, no planea confirmar “por ahora” al Fiscal de Delitos Económicos. Entendemos que le estarán buscando la vuelta para nombrarlo Fiscal de Conflictos Religiosos o Fiscal de la Niñez Desvalida. Vale decir, condenarlo a una tarea monacal o a un versión masculina de la Madre Teresa de Calcuta para que se preocupe de la suerte de los pobres y abandonados, pero que deje de fastidiar a los poderosos de una vez.
Dirán que el caso es una zoncerita frente al anuncio de que se intentará garantizar la reelección del Presidente Nicanor Duarte Frutos por la vía de una simple enmienda constitucional, cuando está demostrado que eso implica un atropello a principios legales claros que estipulan que una decisión de ese tipo, merece una “reforma” constitucional para la que muy difícilmente exista consenso.
Los paraguayos hemos visto claros afanes de dominación a cómo de lugar y de imposición de caprichos de poder más allá de lo permitido. Sin embargo, la política es también el arte de lo posible y no nos parece posible, que Giuzzio pueda ser considerado una simple pieza a cambiar.
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Esta es una cuestión que tiene que ver con el "Virrey" que envió señales invitandolo al Fiscal a almorzar o a comer mbejú. El "poder del mbejú".
ResponderEliminarSupongo que a eso te referís, al guiño de apoyo del "Virrey".