jueves, junio 08, 2006

Esta es nuestra respuesta a The Guardian


No tiene sentido justificar ni defender la desprolijidad paraguaya encerrada en la falsificación de marcas pero no podemos ocultar lo curiosa que nos resulta la inquietud del ciudadano inglés que cuestiona severamente en The Guardian, la piratería paraguaya que lleva a ofertar la camiseta de Inglaterra en 7 dólares en Ciudad del Este, dijo mi amigo Papo Martínez, un libre pensador.
No te entiendo, le dije.

Me respondió con una pregunta ¿No te sorprende francamente que el señorito británico haga una escandalosa exposición de vergüernza ante tamaña ofensa a su decencia y se olvide de que los ingleses han sido históricamente los grandes exponentes de la piratería?
Me removí en mi asiento y lo animé a seguir con su razonamiento y Papo muy serio me dijo que hablaba de la piratería criminal, la más inmoral de todas. La que ayudó a engrandecer la corona británica mediante el saqueo del oro robado a Sudamérica. Y no estamos hablando de 7 dólares sino de carabelas repletas de oro y plata ¿Eso no le ofende al columnista de The Guardian?, dejó flotando la pregunta
Yo preferí callarme y no cortar el hilo de su análisis histórico-futbolero.
Si la Reina de Inglaterra hoy es una de las mujeres más ricas del planeta, es justo que nos preguntemos cuanta parte del oro que reluce en sus baules fue robado de comarcas muy vecinas a las nuestras. Y nos referimos a la reina descendiente de otra "soberana" que dió un majestuoso real premio al más sanguinario de los piratas al que nombró Caballero de la Reina por "los valiosos servicios prestados a la corona".
- Cuántos goles en contra representa para Inglaterra eso? le pregunté.
No me respondió inmediatamente y continuó: "Ese macabro antecedente que nos habla de que Su Majestad Isabel I, como por arte de dorada magia convirtió en honorable al saqueador de bergantines, por elegir tan lucrativa profesión en beneficio del tan distinguido Reino parece que no incomoda a Garth" espetó y siguió: El famoso pirata Francis Drake se convirtió Caballero de fina estampa.
Dios salve a la Reina y a todos los ingleses que muy orondos cantaron loas y admiraron y siguen admirando a "Sir" Francis Drake, elevado a la categoría de héroe y por ende, objeto de distinciones y eterna gratitud de hombres, mujeres y niños, todos hijos de la bendita y rubia Albión.
Si. El señorito y su amigo Garth tienen razones para hablar de la escasa probabilidad de ganar al futbol inglés y gritarán que el Reino Unido jamás será vencido, me espetó y yo solo sorbía el tereré con cepacaballo en maseración.
Tocandose la barbilla Papu dijo que tal vez se refieran a que no habrá "hoooligans" de Paraguay en el partido en Frankfort, como ese ramillete de mozalbetes británicos divertidos y dicharacheros que celebran sus victorias de la misma manera que exteriorizan sus decepciones por las derrotas. Vale vale decir, rompiendo vidrieras, destruyendo vehículos y en medio de alegres canalladas, bebiendo como dromedarios, espirituosos nectares capaces de garantizarles memorables borracheras destructivas.
Yo pensé que estabamos ganando por goleada pero me decepcionó con su exposición. 4-4
Un empate entre Inglaterra y Paraguay en el Mundial de Alemania podría mantenerse hasta el minuto 90 me explicó con paciencia. Añadió sin embargo que si consideramos que el imperio británico se enriqueció subyugando a sociedades esparcidas por este mundo redondo como una pelota y que mató entre otros a los indúes por manifestar la estupidez de pretender romper el yugo inglés, sin considerar que "la pérdida de la India supondría para Inglaterra un golpe fatal y definitivo. Es parte de un proceso que nos reduciría a ser una nación insignificante" al decir de otro Sir, Winston Churchill, creemos que sería un resultado injusto.
Me quedé un poco más tranquilo y Papo arremetió de lleno:
Pero si todavía tomamos en consideración que el mismo Churchill vilipendió a Ghandi, uno de los hombres más dignos que produjo la humanidad desde Jesucristo, emitiendo epitetos del tipo: "el nauseabundo y humillante espectáculo de este viejo abogado del colegio de abogados de Londres, hoy fakir sedicioso, trepando por las rampas del palacio del Virrey, para discutir y negociar de igual a igual con el representante del Emperador, mientras pone en marcha una insolente campaña de desobediencia civil".........francamente se viene el quinto gol paraguayo en tiempo de descuento y el partido termina Inglaterra 4- Paraguay 5.
Fue el momento en que esbocé una leve sonrisa que mi amigo interrumpió con un agregado:
Ahh!!, habría que ver si el marcador no aumenta por que cuando el árbitro cobra aire para dar el pitazo final se produce un tiro de emboquillada que sorprende al arquero británico y que parte de los libros de la historia que cuentan que fue Inglaterra el país que financió al ejército brasileño en la Guerra contra la Triple Alianza para aniquilar paraguayos, porque estratégicamente convenía destruir la incipiente industrialización paraguaya que podría poner en riesgo los intereses industriales británicos en esta parte del globo.
¿Que tál?, me dijo Papo, abordó el colectivo sobre la Avenida Mariscal López y se fue. Ya desde la ventanilla del transporte público me dijo que enviara de todos modos un abrazo a los hermanos ingleses y que el futbol nos haga mejores!!!, y se perdió en la distancia.
Yo sólo cumplo el pedido de un amigo.

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