Vaso de leche importada: Paraguay, país agrícola, ganadero y de políticos hipócritas

Que no terminemos llorando sobre la leche derramada.

A los niños paraguayos les enseñan que “Paraguay es un país agrícola y ganadero con gran potencial de producción de carnes, cueros, lácteos y derivados…” y desde pequeños mamamos todo eso para que teóricamente nuestra formación profesional y cultural apunte a fortalecer ese contexto y prosperar en él. A esos mismos niños ahora se les da una merienda basada en leche importada porque así conviene al negocio de quienes lucubraron el plan de negocios.

Si la enseñanza que se inculca está desconectada de lo que los gobernantes-mercaderes hacen, lo que acontece es que se instala un cuadro de incongruencia, de insensatez que fertiliza el terreno para la construcción de una ciudadanía hipócrita.

Políticos-comerciantes
Ese es el tipo de políticos que al pensar solamente en sus negocios condenan al resto al estancamiento, al atraso, nos condenan a pensar constantemente a dónde emigrar.
¿Cómo un docente puede ejercer correctamente su magisterio cuando lo que alecciona a sus niños, de palabras, no lo puede corroborar, ratificar, revalidar señalándoles que el vaso de leche que los está alimentando y que ellos lo están saboreando es el fruto del país agrícola y ganadero que los vio nacer?
Si somos potencia ganadera y láctea lo coherente nada tiene que ver con lo que por lo visto conviene a los políticos.
El gobernador del Departamento Central, Carlos Amarilla del Partido Liberal Radical Auténtico ignora que hay una recomendación de la dirección de Contrataciones Públicas y anuncia que en las próximas horas se adjudicará la provisión de merienda escolar con leche importada, a la firma Masily, propiedad de sus correligionarios liberales radicales.
Está apresurado Amarilla. Apuradísimo. No ve la hora de que se adjudique el negoio y que se pague y se cobre. Que todo se concrete pronto. Eso es lo que claramente muestra.
Y le comprendemos. En su mente está el negocio y no lo que debe estar en la mente de un político: el interés general.
A él no le interesa la mano de obra que se va a generar, la riqueza que se va a quedar en el país si se consume leche nacional. No le interesa la prosperidad de los demás. Luego de ser electo, se olvidó de todo eso. Tiene otros planes en la mente de los que lamentablemente los ciudadanos no formamos parte.

Amarilla tiene la leche, Lugo la tinta
El Presidente Fernando Lugo fue elegido para borrar el estilo de gestión publica que nos condena al atraso como idear licitaciones públicas a la medida de los amigos y no a la medida de los intereses nacionales. Tiene la lapicera.
Amarilla tiene la leche pero Lugo tiene la tinta. Una tinta parecida a las que usan los niños cuando escriben las lecciones de que el Paraguay es un país agrícola y ganadero. La misma tinta que usamos los comunicadores para decir que el Paraguay es un país de políticos sinvergüenzas.
Fernando Lugo debe anular la licitación de la merienda escolar y privilegiar el compre nacional.

O bien de una buena vez le alquilamos el país a los ingleses, a los franceses o a los japoneses y Carlos Amarilla organiza la licitación.